Congestión mamaria
Aprenda qué es la congestión mamaria y cómo tratarla.
Es normal que sus senos se sientan diferentes después del nacimiento de su bebé. Sus Senos están produciendo leche y tienen flujo sanguíneo adicional, por lo que pueden sentirse sensibles y llenos. Pero si sus senos están calientes, duros y dolorosos, pueden estar demasiado llenos de leche o congestionados. Si cree que sus senos están congestionados, hable con el personal de lactancia materna del WIC.

Causas de congestión mamaria
La congestión ocurre cuando la leche no se elimina completamente de los senos. Puede ocurrir en cualquier momento, pero lo más probable es que ocurra:
- A medida que su leche pasa de ser calostro a leche madura.
- Si hay cambios repentinos en la frecuencia con la que amamanta, como saltarse algunas tomas o sesiones de extracción.
Signos de congestión
Si sus senos están congestionados, pueden sentirse duros, llenos, calientes, sensibles y dolorosos, y es posible que tenga fiebre baja. También puede ser difícil que su bebé se agarre al área del pezón.
Prevenir la congestión
La congestión es incómoda y puede provocar otros problemas como conductos tapados o una infección mamaria. También puede ralentizar o reducir su producción de leche porque su cuerpo no está recibiendo el mensaje de producir más leche. Amamantar o extraerse leche cada 2 a 3 horas y cuidarse bien puede ayudar a prevenir la congestión.
Amamantar con frecuencia
- Amamante a su bebé con frecuencia en las primeras semanas, de 8 a 12 veces en 24 horas.
- Asegúrese de que su bebé se agarre correctamente del área del pezón para garantizar que pueda extraer la leche de manera efectiva.
- Considere evitar las tetinas y otros pezones artificiales hasta que usted y el bebé estén cómodos y la lactancia materna esté establecida. Eso ayudará a regular su producción de leche.
- Si va a volver al trabajo o a la escuela, extraiga su leche con frecuencia y a intervalos regulares mientras usted y su bebé están separados.
Cuide de sí misma
- Aliméntese bien, beba muchos líquidos (especialmente agua) y duerma lo suficiente.
Alivio para la congestión
Para la mayoría de las mamás, la congestión generalmente desaparece en unos pocos días siguiendo estos consejos:
- Amamantar primero del seno congestionado.
- Antes de la lactancia, fomente el flujo de leche. Coloque un paño tibio y húmedo en sus senos o tome una ducha tibia durante 10 a 20 minutos.
- Masajeé sus senos antes y durante la alimentación, moviéndose desde la pared torácica hasta el pezón.
- Si su seno está duro extraiga, en forma manual o mecánica, un poco de leche antes de amamantar. Esto suavizará su seno y facilitará el agarre del bebé al área del pezón. Asegúrese de extraer solo suficiente leche para ablandar sus senos o brindarle comodidad. Si se extrae demasiada leche, puede fomentar la producción de leche y seguir congestionándose.
- Entre las tomas, coloque compresas frías en sus senos para ayudar a reducir la hinchazón y el dolor.
Exceso de producción de leche
Algunas mamás producen más leche de la que su bebé necesita. El exceso de producción puede causar congestión frecuente y flujo rápido de leche y dificultará que su bebé mame. Si cree que está produciendo demasiada leche, hable con su médico o la experta en lactancia materna del WIC.
Dónde encontrar ayuda
Su personal local de lactancia materna del WIC puede ayudarla a aliviar la congestión. También pueden darle consejos para prevenirla.